Hay una libertad primera:
la de estar callado.
Y otra tal vez más alta:
la de permanecer muy quieto
escuchando el murmullo de todo lo que vive.
Pero cuando compruebo esa verdad tan simple
vienen gentes y en coro
gritan que les ofendo,
que no hay mayor insulto que negarse
a compartir el gesto y la palabra.
Yo les contemplo, muero un poco,
y por respeto a ti, Señor, sigo callando.
Chantal Maillard
Chantal Maillard
1 comentario:
¡Pues no has dicho nada!
Hay gente que le molesta todo, cualquier cosa que hagas, el caso es protestar. Y ellos callados seguramente estarían también mejor porque con su actitud no arreglan nada. Pero ahí estan...
Hay una reflexión budista sobre esto: Si no puedes mejorar el silencio, no digas nada.
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